¿Dónde está el cinc?

El ácido clorhídrico ataca al cinc, disolviéndolo, con lo que el metal "desaparece". Para producir la reacción lo mejor es disponer de balines de cinc cilíndricos, de pequeño tamaño. Además, se puede observar la influencia de la concentración del HCl y de la temperatura en la velocidad de la reacción.

Una forma de hacer la experiencia

Añadir unos balines de cinc a dos tubos de ensayo. Añadir a uno ellos HCl diluido y al otro HCl más concentrado (aproximadamente 0,5 M y 3 M son valores adecuados).

Observar el burbujeo por desprendimiento de gas. Acercando una llama se produce una pequeña explosión al quemarse el hidrógeno formado. La diferencia de velocidad de reacción es apreciable en el caso del ácido más concentrado.

Sujetar con una pinza de madera el tubo con el ácido diluido y calentarlo suavemente. Observar cómo aumenta la velocidad del proceso.


Se puede plantear la cuestión siguiente: si el cinc estuviera en un único trozo ¿la velocidad sería la misma? Recoger las aportaciones y hacer la demostración con un trozo de cinc en granalla o pastilla.

Zn (s) + HCl (ac)   →   ZnCl2 (ac)  +  H2 (g)

El material que necesitas

Zn en balines y granalla o trozos, HCl diluido y concentrado, tubos de ensayo termorresistentes, gradilla, mechero Bunsen, pinza de madera de mango largo.